Esta
carreta que vemos en esta interesante fotografía de color, de la Romería de San
Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza de la Villa de La Orotava, a su paso
por la plaza del Ayuntamiento, en la década de los años sesenta del siglo XX.
Es la carreta más apasionante de todo el costumbrismo de La Villa. Apasionante
en su forma y en su persona. Se trata de la célebre carreta de don Norberto
Morales, que fue el mago mayor de la romería orotavense y también lo fue el
carnavalero mayor de los carnavales de la Villa y uno de los pioneros de
restaurar el carnaval en Tenerife al principio de esa misma década,
presentándose con su amigo e inseparable don Maximino Álvarez Arbelo vestidos
de damas clásicas en el palacio episcopal de La Laguna, para hacerle ver al
entonces ilustre obispo Nivariense, el güimero don Domingo Pérez Cáceres que el
carnaval era necesario para el divertimiento y vivencias de la humanidad.
La
carreta que luce de un puro costumbrismo del Valle, acompañan a don Norberto,
Vicentito Miranda, su hermana Carmita Miranda, su hija Adoración Morales y su
nieto Nicandro González.
BRUNO
JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR
MERCANTIL
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