Don Antonio Jiménez Romero, salesiano de la comunidad de la
Villa de la Orotava, nos dejó en la madrugada del día 22 de Julio para
encontrarse con el Señor.
A la edad de 94 años, nos deja un testimonio incomparable de
entrega, salesianidad, cariño y devoción a nuestra madre María Auxiliadora.
Que el Señor lo haya acogido con un gran abrazo y nuestra madre
lo tenga ya en su regazo.
Gracias don Antonio por elegir y acoger nuestra Villa de La
Orotava, para despedirse definitivamente para siempre. Gracias, gracias.
El amigo desde la infancia de la Villa
de La Orotava y compañero AA. AA. Salesiano; PACO MESA BRAVO publicó entonces
estas notas en el matutino tinerfeño “La
Opinión de Tenerife”, correspondiente al año 2013.
Don Antonio Jiménez es un sacerdote
salesiano que en el año 2013, acreditaba 60 años de presbítero, 70 de salesiano
y 90 de vida: “…Don
Antonio ha sido un salesiano ejemplar en todos los centros donde ha sido
destinado; La Orotava, Utrera, Triana, Cádiz, Granada. Y de manera muy especial
le recuerdan con cariño sus AA. AA de Montilla, Pozoblanco y Palma de Río.
Nació
en Córdoba en el año 1923, muy cerca de la Catedral, Obispado y Palacio de
Exposiciones y Congreso de la ciudad. La Pila Bautismal se conserva en un bar
restaurante cercano a la Mezquita, según sus averiguaciones.
Ingresó en el Noviciado Salesiano en 1943, se ordenó sacerdote en 1953. Y se
jubiló laboralmente a los 73 años, aunque sigue en activo pastoralmente.
A sus
90 años camina y camina, por La Orotava, Puerto de la Cruz y Santa Cruz de
Tenerife. Ingresó en el Seminario Salesiano de Montilla, estudió filosofía en
San José del Valle, ordenándose sacerdote en Madrid. Estuvo en Roma durante 2
años, estudió Pastoral. Pasó dos veranos en Alemania, en la isla de Reicheman,
cerca de Constanza colaborando en parroquias y campamentos de verano. Lo que le valió para aprender el Alemán, y
debido a este conocimiento lingüístico, su superiores los trasladaron a ;La
Villa de La Orotava en el año 1979, para que practicara el idioma teutón con
las colonias alemanas de la zona y más tarde colaborar como sacerdote en la Ermita de San Telmo del
Puerto de la Cruz.
Durante
32 años es consiliario y animador de la asociación archicofradía de María
Auxiliadora en la Villa. Desde el
Colegio de San Isidro orotavense, ha organizado viajes religiosos – culturales
durante más de 15 años por la Península Ibérica y casi todos los países de
Europa. También ha organizado peregrinaciones a Palentina, Cichabamba
(Bolivia), en este asistir y participar en un Congreso Mundial de asociaciones
de María Auxiliadora.
Gran
aficionado a la literatura, lee continuamente, al teatro etc. Recuerda con
mucho cariño haber conocido personalmente a beato Fraile Leopoldo que tenía su
residencia junto a los salesianos de Granada. Y presume de haber tenido como
profesor a don José Manfredini que fue alumno de Don Bosco.
Ya no
da clases, a sus 90 años (2013) a cuesta continua en la brecha perfectamente,
nadie le quita pasarse todas las mañanas por las aulas del colegio orotavense
de San Isidro, de los más pequeños para hablarles de Jesús y de María
Auxiliadora…”
BRUNO JUAN ÁLVAREZ ABRÉU
PROFESOR MERCANTIL
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